viernes, 11 de diciembre de 2009

Entre la espera y la esperanza: SME

Mineko nos comparte su reseña de la reunión del SME a la espera del resolutivo del amparo en contra de la extinción de LyFC.

Lo de hoy, chamacos:

ENTRE LA ESPERANZA Y LA INCERTIDUMBRE



Toda la mañana fue de espera mientras las afueras del Tribunal Federal de Justicia en San Lázaro se llenaban de colores predominantemente rojos. Claro, es la fuerza del SME, actor principal de este drama que tiene incidencia a largo plazo en todos los sectores laborales de nuestro país. Aquí radica la importancia de lo que se espera de la sentencia que dicte la jueza Guillermina Coutiño.

El momento más significativo que revistió este día fue al momento en que salieron las abogados SMEítas del recinto para dar parte de lo avanzado en el trancurso de esta mañana, una mañana en donde muchos se hicieron presentes desde muy temprana hora, otros quizá hasta pasaron la noche (no logré confirmar esto, pero sí me dijeron que hay muchos agremiados que están viviendo en sus autos y que no se duda que ellos se hayan desplazado desde la noche anterior a las afueras de dicho tribunal).

En palabras de abogados como Carrancá, las condiciones para que la balanza se incline a favor del SME son muchas. Yo no sé mucho de leyes, me aplico más en lo que el sentido común me va indicando y desde que el mismo Calderón diera su mensaje por televisión abierta de las razones para haber liquidado a Luz y Fuerza las incongruencias saltaron de inmediato. No las enlistaré, son de sobra conocidas, pero sí nos pone a pensar mucho en la manera en como se dan las cosas en México: la esperanza en que las leyes se cumplan no se pierde y es algo que siempre será un aliciente, así sea pequeño, para seguir intentándolo. Es la incertidumbre de lo que acontezca 'en lo oscurito' lo que modifica el estado de ánimo y preocupa... y con razón.

El ver cómo los rostros de los cientos de agremiados reunidos el día de hoy pasaron de una sonrisa a la seriedad me dan Fe de ello. La incertidumbre se lee en esos ojos. Cuando las palabras de Carrancá explicaron que el fallo se daba hasta el día de mañana, las expresiones no se dejaron esperar: 'La van a presionar', escuché una voz a mi izquierda y sin voltear a ver quien lo había dicho, el tono de preocupación lo dijo todo. Yo me acordé de aquellos días de agosto de 2006. Ya he sentido también ese dejo de incertidumbre, cuando sabes que la razón y los fundamentos te acompañan en gran medida, pero también sabes lo que es la aplicación de la ley en nuestro país, así que espero, de todo corazón, que con el SME no suceda lo que nos sucedió el 10 de septiembre de 2006... y aún así: aquí estamos. ¿Cómo no solidarizarse con los demás ante una injusticia cuando la vives en carne propia?


Independientemente de lo que arroje el fallo el día de mañana, me queda claro que el SME ya no se detiene. Dice un dicho popular '¿a qué puerta llamas que no te contesten?' y el pseudo-gobierno de FeCal tocó una puerta que va a abrir muchas más y el SME será cabeza de esta nueva etapa que viene. La consigna que han venido haciendo suya de 'El SME se queda, Calderón se va' estoy segura que no se quedará en palabras y en la medida que me sea posible, yo quiero seguir estando ahí para ser testigo de cómo se va escribiendo esta trama en esta nueva etapa histórica de nuestro México y no importa la cantidad de frentazos que todavía nos falten, en verdad no importa. El SME es una buena prueba de que, pase lo que pase, estoy viendo a un conglomerado de individuos mucho más fuerte y cohesionado que antes.

Las imágenes de hoy:

Recién llegando y con silla plegable en mano para aguantar la larga espera bajo el sol...




Así se veía afuera de la Asamblea Legislativa a las 9:30 de la mañana...


¡La que nos espera con estos individuos! Quien avisa no es traidor...



El ingenio que arranca sonrisas...






En menos de cinco minutos llegaron varias mujeres SMEítas, con ayuda de algunos camaradas montaron mesas, pusieron encima ollas y tuppers, sacaron las tortillas ¡y órale!: llamaron a los agremiados a hacer fila para que comieran algo sin costo alguno. Estos actos son la muestra de la fuerza del SME. Me invitaban, pero yo no pertenezco al gremio, a mí no me falta el trabajo (en estos momentos, mañana quién sabe) y no hubiera sido correcto agenciarme lo que es para ellos, que ahorita no perciben salario alguno...






A la espera...



Incertidumbre. En cuanto dieron aviso de lo acontecido en el interior de la Asamblea y que el fallo sería hasta el día de mañana, la mayoría empezó a avisar a los suyos...



Pase lo que pase mañana, el SME convoca para estar en el Monumento a la Revolución del día de mañana. La cita es a las 12 del día. Ni hablar: la libertad implica esfuerzo y sacrificio.

Mineko.